jueves, 27 de mayo de 2010

¿Por qué nos movilizamos el 1 de junio?

La llegada de la derecha al gobierno, ha puesto el pie en el acelerador a la agenda privatizadora en materia de educación superior de la clase política. Nos referimos a la misma agenda que fue ejecutada implacablemente por la concertación en los últimos 20 años y que, gracias a su aplicación, tiene sumida a nuestra educación en una profunda crisis.

Aunque en muchas ocasiones no logramos relacionar aquellos conflictos que se nos presentan en el día a día con las fallas que presenta el sistema educativo a nivel nacional, la realidad nos demuestra que esta problemática afecta directamente, y de diversas formas, la cotidianidad del estudiante.

Una de éstas manifestaciones de la crisis, tal vez la más apreciable, es la progresiva desvinculación financiera del Estado con las universidades tradicionales, como la nuestra, el llamado problema del autofinanciamiento. Esto se traduce en la constante alza a los aranceles y la matrícula, que generan un alto nivel de endeudamiento por nuestro “derecho” a la educación.

El autofinanciamiento también perjudica a los profesores y funcionarios, pues ante la externalización de servicios por parte de la universidad, sus labores quedan en manos de la subcontratación lo cual genera empleos precarios e inestables.

Otra clara manifestación de esta crisis, se refiere a la exclusión de las comunidades universitarias de los procesos de toma de decisiones dentro de las casas de estudios, situación que no es ajena a nuestra realidad como PUCV. El resultado de lo anterior es que sólo una elite reducida defina lo que es mejor para todos, atentando así contra los principios más elementales de la democracia.

Los grandes problemas que tiene nuestra educación superior debemos tomarlos como desafíos, a fin de plantearnos caminos para su solución. En esta línea, en la Convención de Estudiantes de este año establecimos nuestras visiones sobre qué hacer de la educación superior, fijando propuestas claras y metas a conseguir.

Un aumento significativo del gasto público en educación superior, un mayor compromiso económico del Estado con las universidades públicas, el rechazo a la subcontratación de servicios académicos y no académicos, democratización de los procesos de toma de decisiones en los gobiernos universitarios y establecer sistemas de acceso alternativos a la PSU, fueron algunos de los derroteros que nos hemos planteado.

Sin embargo, la claridad de nuestras definiciones contrasta con la falta de capacidad de la CONFECH para constituirse en actor capaz de enfrentar estos desafíos, lamentablemente, dicho organismo se que se encuentra raptado por los intereses de los partidos políticos tradicionales que no representan el sentir de la mayoría de los estudiantes de nuestro país.

Los desafíos son grandes y debemos enfrentarlos con unidad, para ellos necesitamos un movimiento estudiantil fuerte, informado, consciente y participativo. Por ello, compañeros y compañeras, les extendemos la invitación a participar en sus asambleas de carrera para que pueden informarse y distutir a fondo todos estos temas, de esta misma forma, los llamamos a participar activamente en la Movilización Nacional de este 1 de junio a partir de las 10.30 hrs. en Plaza Sotomayor, para que podamos todos juntos avanzar hacia una solución.

MESA EJECUTIVA

Federación de Estudiantes

Pontificia Universidad Católica de Valparaíso

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hi, i just want to say hello to the community